miércoles, 20 de mayo de 2009

Mi confrontación con la docencia

Hola compañeros y tutor les voy a comentar como es que me inicie como docente:
Cuando yo estaba por decidir que carrera iba a estudiar quería la carrera magisterial pero mis papas no me dejaron por el hecho de que en mi familia la mayoría son ingenieros y había que seguir la tradición, me convencieron y así fue como cursé la carrera de Ingeniería Industrial en la Unidad Profesional de Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas del Instituto Politécnico Nacional, ejercí durante casi tres años la carrera pero sentía que algo me faltaba, en alguna ocasión me comentó un compañero de generación que estaban solicitando un profesor que si quería ir a dar las clases, me di cuenta que ésta era la oportunidad que siempre había esperado para desarrollarme en lo que desde pequeña quería, me presenté, di mi clase piloto y me aceptaron, así es como llevo seis años dando clases de matemáticas. Pienso que el hecho de ser profesor implica mucha responsabilidad, ya que no solo debemos ser una imagen positiva para los chicos dentro de la escuela sino también fuera de ella, además siento que cuando somos profesionales en nuestro trabajo los chicos nos ven como si todo lo supiéramos y así se acercan a nosotros a preguntarnos sus dudas aunque no sean de la materia que impartimos. Impartir clases en el nivel medio superior para mí implica mucha responsabilidad ya que son muchachos que están terminando de dejar la niñez para empezar a formarse como hombres de bien, la mayor satisfacción que tengo es que hay alumnos que ya egresaron y regresan a saludarme, a platicarme como les ha ido en sus escuelas o en sus trabajos, o en ocasiones a pedir asesorías, lo malo, es que no todos los chicos terminan sus carreras por diferentes situaciones y aquí es en donde me siento defraudada, siento que mi método no funcionó que algo faltó para que pudieran salir adelante, más si los motivos son porque reprobaron la materia que yo imparto y no se acercaron a mí. Ser docente ha cambiado por completo mi vida, me ha hecho mucho más sociable pues he de comentarles que yo era muy introvertida, ahora sé que no cambiaría por nada la docencia.
La forma en que me preparo para dar mis clases es: en mi Plantel en el momento en que nos entregan nuestros programas de la materia a impartir nos piden la planeación de todo el semestre, por lo que yo o mi jefe sabemos que tema es el que voy a impartir en determinada fecha, cierto es que en la mayoría de los casos no se cumple debido a causas propias de los temas o de los grupos, pero no se aleja mucho de la realidad. Bueno pues antes de entrar al salón yo ya se que temas les voy a impartir ya estando dentro de éste lo anoto en el pizarrón junto con la fecha, les digo a los chicos que los apunten, les paso lista, si se quedó alguna actividad de la clase anterior para revisar la comentamos, evaluamos y empiezo la clase. El problema que yo me encuentro es que en mi plantel se cuentan con grupos demasiado grandes por lo que en el momento de revisar alguna actividad me llegaba a tardar, entonces por lo que opté fue por una autoevaluación que me ha dado resultado, con esto he encontrado que la mayoría de los alumnos se evalúan honestamente, claro que también existen aquellos que dicen estar bien pero sé que los errores los corrigieron. A donde quiero llegar con la impartición de las clases y actividades que realizo es que, además de cubrir un programa de estudios pueda ampliar el conocimiento de los muchachos ya que en el momento en que ellos decidan dedicarse a alguna actividad productiva lo van a necesitar.




5 comentarios:

  1. ¡Qué frecuente era, y aún lo es, que los padres pretendan decidir la profesión que han de tener los hijos! Y en el caso de las hijas hasta piensan que no necesitan tener ninguna profesión y que si acaso estudian algo lo hagan por pasar el tiempo o para integrarse pronto a un trabajo que conciben como "propio de la mujer", como puede ser el de secretaria.

    Tu caso es peculiar en el sentido de que eligieron la ingeniería, que mucha gente todavía piensa que es profesión para hombres. Pero ¿qué le veían de malo a la docencia?

    Me alegra que hayaas podido dedicarte a algo que te gusta: la enseñanza. También es bueno el que tu carrera te haya permitido el dominio de las matemáticas, que es la materia que impartes.

    Es natural que te sientas contenta de los logros de tus alumnos y triste por los fracasos o dificultades que tengan que enfrentar, pero no asumas la responsabilidad por una ni otra cosa: hay tantos factores (personales, familiares, económicos, sociales) que influyen en la vida de todos nosotros, que el desempeño de una maestra, por importante que pueda ser, es solamente uno de esos factores.

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  2. Parece que a varios nos pego en como llegamos a la docencia, en realidad pasó algo similar, mis padres en la educación, yo un iperactivo al cual mandaban llamar seguido por mis travesuras, despues por necesidad entre a impratir cátedra y me gusto, despues de 13 años continuo en ello y es una verdadera pasion lo que me gusta hacer con los jovenes.
    Verdaderamente es un gusto leer un simil de mi vida.
    Marco A. Carrillo

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  3. A veces, cuando uno recuerda las circunstancias del como fue que llegamos a la docencia, nos parece increible, ya que el gusto por una profesión nace desde que estamos pequeños o cuando somos adolescentes porque admiramos a un docente o porque admiramos a cualquier otra persona o personaje y entonces en ocasiones incluso llegamos a imitar sus conductas y sus formas de comunicarse. Era divertido ji ji ji.Por otro lado, que bien que tratas de seguir tu planeacíon y aunque como señalas que no se eleja mucho de la realidad, en mi caso a veces sí se aleja de lo planeado mucho, bastante, por la suspensión de clases o porque paso tal cosa o por el puente, que aunque ya estan programados, siempre, casi, me hacen mal obra. Hasta la próxima.

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  4. Hola Lidia:
    Te saludo con respeto y aprovecho para felicitarte por este tu espacio, que me parece muy interesante además de compartir con nosostros esta maravillosa faceta de tu vida:
    Recibe un abrazo desde territorio 108
    Mario Bernal

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  5. La vida es una cadena de ilusiónes, que se rompen para dar paso a otras....quiza mejores, en realidad lo que se hace con gusto se hace bien y muchas veces, despues de tiempo... a la primera, transmitir un conocimiento, permitiendo que el receptor lo imagine, lo procese y lo realimente, es la maravilla de aprender, nunca debemos aferrarnos al aula, el aprendizaje se da visual, auditíva y kinestesicamente, de ahi los intereses, animos y motivación que infrinjamo en el dicente, darán como resultado lo que esperamos al enseñar, o simplmente al ser facilitadores del conocimiento.
    Te felicio Lidia, se ve que haces con gusto tu trabajo.

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